sábado, 26 de febrero de 2011
ALGUNOS ASPECTOS DEL SIMBOLISMO DEL COMPÁS, por H:. Graal
Junto a la escuadra, el compás es el instrumento más emblemático de la Franc-Masonería y de la ciencia constructiva que la caracteriza, la Arquitectura, llamada en la antiguedad Arte de la Geometría por ser una directa aplicación suya. En su sentido genérico el oficio de masón es el de geómetra, no solo en un aspecto "idealizado" que hace referencia al arte de los antiguos constructores de catedrales, sino en el estrictamente iniciático y operativo, dado que la geometría es una ciencia sagrada, un "Arte Liberal", cuyo carácter simbólico encierra el conocimiento de los secretos y misterios de la Construcción cósmica. "Dios geometriza al crear", dice Platón, lo que confirman también otras tradiciones a parte de la Masonería, como puede verse en el hinduismo con la figura de Viswakarma, el Arquitecto divino. Y en el cristianismo con el Cristo Pantocrator trazando con el compás los límites del mundo, especialmente en la iconografía medieval. Es así también que la inscripción grabada en el exterior del templo de Apolo en Delfos indicaba expresamente: "Que nadie entre aquí si no es geómetra", pues va de suyo que en este oficio iniciático es imposible conocer la Voluntad o Plan del G:. A:. D:. U:. sin conocer asimismo los principios espirituales de esta ciencia. Y decimos “espirituales” porque el conocimiento meramente escolar, especulativo y técnico de la geometría llamada “analítica”, no es, en este caso, sino una pálida sombra de la verdadera geometría iniciática. En el mismo sentido, es fácil también reconocer la presencia de una geometría natural en la estructura de todas las formas vivas, presencia que abarca desde lo atómico a lo sideral y el ámbito general del espacio, concebible y expresable en términos geométricos por una intuición innata en el ser humano.
jueves, 17 de febrero de 2011
PARAMARTHASARA (1-4)* de Abhinavagupta (y comentarios de Yogaraja). परमार्थसारः
¡Que el Supremo Señor sea siempre victorioso! Nunca ha nacido (es eternamente existente). Siendo experto en el arte del propio ocultamiento, ya que, aunque la naturaleza de su Ser es la Conciencia plena, asume la forma del mundo.
Considerando que me ha sido solicitado por personas sabias, Yo, Yogaraja, escribo este comentario, de carácter explicativo, a este sintético compendio sobre la Suprema Verdad [“Paramarthasara”], obra de mi maestro [Abhinavagupta], añadiéndole nuevas consideraciones. Teniendo en cuenta que el propósito de este Tratado era el conseguir la destrucción del sin fin de impedimentos que proceden del dominio de la falsa identificación del Sí Mismo con el cuerpo individual, el autor, Abhinavagupta, expresa, al principio de este Texto, su profunda aspiración por identificarse con el Supremo Señor, renunciando a su forma mundana, que le convierte en un experimentador limitado, y asegurándose su unión con su propia esencia divina, cuya naturaleza es la Pura Conciencia y el Supremo gozo. Esta es la esencia de todo lo escrito.
Verso 1
परं परस्थं गहनादनादिमेकं निविष्टं बहुधा गुहासु।
सर्वालयं सर्वचराचरस्थं त्वामेव शम्भुं शरणं प्रपद्ये॥१॥
paraṃ parasthaṃ gahanād anādim
paraṃ parasthaṃ gahanād anādim
ekaṃ niviṣṭaṃ bahudhā guhāsu |
sarvālayaṃ sarva-carācara-sthaṃ
sarvālayaṃ sarva-carācara-sthaṃ
tvām eva śambhuṃ śaraṇaṃ prapadye || 1||
Al que transciende, al que está más allá de Maya, al que no tiene principio, al Uno, al que existe en todos los seres en multitud de formas, al que es el refugio de todo y está en todo lo animado e inanimado, a Él solo, ‘Sambhuṃ, me dirijo en busca de protección.
jueves, 10 de febrero de 2011
INTRODUCCIÓN AL SHIVAÍSMO KASHEMIR, por Arcadio Rojo*
Conceptos centrales de la doctrina
La escuela Trika del Shaivismo es un protagonista firme del Monismo Integral. En consecuencia postula la existencia de una Única Realidad a la que le asigna diferentes nombres como “Parameshvara” (El Supremo Señor), “Paramashiva” (El Supremo Dador de Bienes), “Parasamvid” (La Suprema Conciencia), “Parapramata” (El Supremo Sujeto), “Caitanya” y “Atman” (Él Sí Mismo).
Siendo la Única Realidad, se dice que el Supremo Señor se manifestó Él Mismo bajo dos formas, Él es la realidad inmanente y, como tal, está presente en todos los seres animados e inanimados, constituyendo su más profundo sí mismo. Él es el refugio de todas las cosas, en cuanto que toda la creación existe en Él Mismo. De igual forma Él es también el ser transcendente más allá del Cual nada existe. Él es llamado, por tanto, por el nombre de “anuttara”, “Paratattva” (La Suprema Verdad), el Ser Absoluto.
“Paramashiva” esta provisto de su divina “Shakti” (Poder Eterno, Energía Suprema), sin ningún tipo de restricción en su naturaleza, recibiendo el nombre de Libertad Divina (“svatantrya”) en la escuela Trika. La divina Shakti no es un mero atributo perteneciente al Supremo Señor; de hecho, constituye un aspecto integral de su Ser e inalienable a su propia naturaleza. Y es a causa de su divina Shakti, que constituye la esencia y el espíritu del Supremo Señor, que se dice de Él que es la Plenitud misma y, por tanto, siempre en eterna paz.
martes, 1 de febrero de 2011
LA CIENCIA DE LAS LETRAS EN 'IBN 'ARABI Y RENÉ GUÉNON (y II), por Abdelbaki Meftah.
PROFETOLOGÍA Y CIENCIA DE LAS LETRAS
Las letras mentales: de Adán a Salomón
Las letras mentales: de Adán a Salomón
En la profetología akbariana, toda ciencia está ligada a un profeta en particular. Las ciencias relativas a las letras mentales se relacionan, como hemos dicho, con Adán; tuvieron su plenitud exterior con el profeta Salomón. Ibn ‘Arabi indica que de las tres categorías, estas letras mentales producen, cuando son evocadas mediante la concentración, los efectos más directos y más eficaces (35). Es gracias a una de sus aplicaciones que el ministro de Salomón pudo, en un abrir y cerrar de ojos, poner ante Salomón, en Palestina, el trono de la reina “Balkis” del Yemen. Salomón encarnaba el Poder Real activo de este lenguaje espiritual, de manera que todos los elementos de la naturaleza y del mundo se sometían espontáneamente a su orden. Es por ello que dice el Corán: « Y Salomón fue verdaderamente heredero de David; y decía: “¡Oh gentes! Nos ha sido enseñado el lenguaje de los pájaros y se nos ha dado en abundancia de todo...”» (Corán, XXVII, 16)(36)
Las letras pronunciadas: De Seth a David y Jesús
Por lo que hace a las ciencias relativas a la categoría de las letras pronunciadas, éstas se vinculan al profeta Seth, hijo y heredero de Adán. Se remontan pues al inicio del ciclo terrestre de la actual humanidad; tuvieron su expansión con el rey Profeta David, como indica este versículo: «En verdad, agraciamos a David con Nuestro favor: “¡Oh montañas! ¡Entonad alabanzas a Dios junto a él! ¡Y también vosotras, las aves”» (Corán, XXXIV, 10). La ciencia de estas letras tuvieron su plenitud en la persona de Jesucristo, que es, según el Corán, “el Verbo de Allah” (kalimatu Allah) y cuyo cuerpo fue sembrado en el seno de Santa María por el soplo del Espíritu Santo, el Ángel Gabriel. Con su aliento resucitaba a los muertos y daba vida a pájaros de arcilla. Así, Jesús se identifica con el Aliento divino existenciador de los seres y de las letras, y representa la conjunción perfecta entre la ciencia de las letras y la ciencia de los Santos, él, que para Ibn ‘Arabi, es el “sello de la Santidad Universal” (37).
lunes, 24 de enero de 2011
LA CIENCIA DE LAS LETRAS EN 'IBN 'ARABI Y RENÉ GUÉNON (I), por Abdelbaki Meftah (*)
(*) Abdelbaki Meftah, especialista en Ibn Arabi, ha publicado Mafatîh fusûs al-hikam; exprofesor de ciencias físicas de la universidad de Guemar, Argelia. Responsable de la Tariqa Belkaidia, rama de la Habrîa (shadilia-darqawia) de la misma ciudad. Agradecemos especialmente su preciosa colaboración y su amable interés por esta publicación.
INTRODUCCIÓN
En primer lugar, deseo expresar mi agradecimiento a todos cuantos han participado en la organización de esta conferencia, por haberme dado la ocasión de hablar de la ciencia de las letras que es uno de los aspectos esenciales de la doctrina sufí, explicitada por el Cheikh al-Albar Ibn ‘Arabi (1165-1240 /560-638 H.) en varias de sus obras (1), particularmente en algunos de los 560 capítulos de su inmensa y fundamental obra “Las iluminaciones de la Meca” (Al Futûhâtu al-Makkiyah) (2). La complejidad, tecnicidad, densidad y extensión, literalmente sin límites, de esta ciencia, no permiten indicar con detalle las líneas de este océano sin orillas. Solo para la explicación de sus fundamentos elementales haría falta una extensa obra. Para darnos una idea de la inmensidad de esta ciencia, Ibn ‘Arabi señala que una de sus secciones comporta por sí sola 3.540 preguntas (3). Digamos no obstante algunas palabras para intentar hacernos una idea de la cuestión.
En primer lugar, Ibn ‘Arabi no se plantea la clásica pregunta del origen del lenguaje, producto de una institución divina o de una convención humana, pues para él todos los nombres y todas las palabras son Nombres y Palabras divinas desde toda la eternidad, todos los seres son Palabras inagotables (4).
Encontramos esta misma concepción en René Guénon (1886-1951), quien expuso las líneas directrices globales para abordar la ciencia de las letras. Escribió seis artículos, cuyos títulos son: “La Ciencia de las letras”, “Angeleología del alfabeto árabe”, “La lengua de los pájaros”, “Los misterios de la letra Nûn”, “Un jeroglífico del Polo” y “Quirología en el esoterismo islámico” (5). En su artículo “Er-Rûh” (6) (el Espíritu Universal), da también un ejemplo de un simbolismo muy importante relativo a las dos primeras letras del alfabeto árabe. En todos estos trabajos se adivina ya las tres principales categorías de letras y sus ciencias.
jueves, 13 de enero de 2011
ENTREVISTA A JEAN CLAIR (el arte moderno a debate)
Jean Clair (1940), pseudónimo literario de Gérard Régnier, es un personaje tan importante en el mundo de la cultura artística como incómodo para muchos prosélitos incondicionales del arte moderno, los adictos a la necedad estética y ética de las tendencias de moda y las travestidas “vanguardias”. En su libro “La responsabilidad del artista” (Visor. Madrid 1998. Y También: Ed. A. Machado Libros. 1999) el autor se preguntaba: "La estética ¿es el último coto vedado de las ideologías?; los artistas ¿deben seguir disfrutando de esa inmunidad (crítica)?..." También nosotros nos preguntamos a qué se debe esa, no ya inmunidad sino impunidad, casi delictiva de niño mimado, estúpido y “gamberrete”, que la sociedad otorga al artista moderno, aplaudiéndole todas sus sandeces, perversiones e incluso excrementos (ver Piero Manzoni, Galeria Pascetto 1961. “Merde d’artiste”) cuando los hace pasar por obra de arte. De igual modo y en otro libro (De inmundo. Arena Libros. S. L. Madrid 2007) el autor dice del arte actual: "El tiempo del disgusto ha reemplazado a la edad del gusto. Exhibiciones del cuerpo, desacralización, rebajamiento de sus funciones y de sus apariencias, morphings y deformaciones, mutilaciones y automutilaciones, fascinación por la sangre y los humores corporales, y hasta los excrementos, coprofilia y coprofagia (...) el arte se ha empeñado en una extraña ceremonia en donde lo sórdido y la abyección escriben un capítulo inesperado de la historia de los sentidos (...) se plantea el siguiente problema: ¿en qué los responsables de las grandes instituciones culturales, en Cassel, en Londres, en Nueva York, en París, en Venecia, tienen interés en bendecir esta ritualidad de una fisiología desnuda?..." y por cierto repugnante.
martes, 28 de diciembre de 2010
LA FRANC-MASONERÍA ANTE LA MENTALIDAD MODERNA, por H:. Graal
Sólo con leer atentamente el ritual de recepción y los manuales de instrucción del primero de los grados masónicos, el de Aprendiz (perfectamente asequibles en cualquier librería especializada) podrían disiparse gran número de confusiones que sobre muchos aspectos de la iniciación masónica afectan a gran parte no sólo de “profanos”, sino también de representantes de esta Orden. Por ejemplo, qué lectura tiene la Francmasonería del mundo moderno y qué valor otorga a sus criterios generales, pues no son pocos quienes, llamándose masones, los aceptan como algo normal, en especial los “cientificamente” probados, incurriendo en una evidente contradicción con sus ideas y su labor iniciática, la cual entonces es absolutamente inoperante, al menos en la dirección adecuada. Igualmente, en qué consiste en el fondo el perfeccionamiento iniciático del masón y qué papel tiene efectivamente la Orden en relación al hombre y la sociedad. Y esto es doblemente importante en cuanto que la doctrina masónica se define esencialmente como una cosmogonía, como una cosmovisión sagrada como sus propios elementos simbólicos y rituales, cosmovisión que difiere de la profana ordinaria y profana, por científica que sea, como cualquier otra tradicional auténtica, entendido que una verdadera cosmogonía encierra todos los principales aspectos de la realidad, y todos los conocimientos posibles accesibles al hombre, el cual dentro de ella no juega un papel accidental sino central y definitivo, al punto de considerarse un verdadero microcosmos perfectamente análogo al Cosmos.
martes, 21 de diciembre de 2010
SOBRE LAS PRESENCIAS DIVINAS Y LOS ESTADOS DEL ALMA EN EL SUFISMO, por Manuel Plana
Taw'il y Tafsir, Tasawwuf y Shari’a
En algunos hadith el Profeta (slaws) afirma explícitamente del Corán tener dos principales sentidos, uno interior y oculto (Batîn) y otro exterior y evidente (Zahîr) (1); cada uno tiene también aplicaciones distintas, aunque siempre complementarias, derivándose las dos principales líneas de exégesis (Istinbât) o discernimiento escriturario ('Ilm al Furqan) (2), la hermenéutica coránica: el Taw'il, interior, espiritual y metafísica, y el Tafsir, exterior y religiosa. A la primera corresponden las ciencias del Tasawwuf, de orden esotérico e iniciático, a la segunda las de la Shari’a y el Fiq, de orden religioso y legislativo respectivamente.
Es competencia del Tasawwuf la realización espiritual y la unificación suprema, meta última del “monoteismo” primordial y abrahámico. Y la de la Shari’a, la sacralización de la vida individual y social, su tiempo y su espacio, en vista a esa unificación como modelo pero según las posibilidades de la gran mayoría, las cuales se limitan a la perfección moral personal. Siendo un solo bloque, ambos no se sitúan en un mismo nivel sino que uno ocupa la base y el otro la cúpula del edificio, uno es el núcleo y otro la periferia; es del primero de donde le viene toda la eficacia al segundo, que no es sino una aplicación analógica al orden de las contingencias externas, que así quedan integradas a un orden sagrado.
En algunos hadith el Profeta (slaws) afirma explícitamente del Corán tener dos principales sentidos, uno interior y oculto (Batîn) y otro exterior y evidente (Zahîr) (1); cada uno tiene también aplicaciones distintas, aunque siempre complementarias, derivándose las dos principales líneas de exégesis (Istinbât) o discernimiento escriturario ('Ilm al Furqan) (2), la hermenéutica coránica: el Taw'il, interior, espiritual y metafísica, y el Tafsir, exterior y religiosa. A la primera corresponden las ciencias del Tasawwuf, de orden esotérico e iniciático, a la segunda las de la Shari’a y el Fiq, de orden religioso y legislativo respectivamente.
Es competencia del Tasawwuf la realización espiritual y la unificación suprema, meta última del “monoteismo” primordial y abrahámico. Y la de la Shari’a, la sacralización de la vida individual y social, su tiempo y su espacio, en vista a esa unificación como modelo pero según las posibilidades de la gran mayoría, las cuales se limitan a la perfección moral personal. Siendo un solo bloque, ambos no se sitúan en un mismo nivel sino que uno ocupa la base y el otro la cúpula del edificio, uno es el núcleo y otro la periferia; es del primero de donde le viene toda la eficacia al segundo, que no es sino una aplicación analógica al orden de las contingencias externas, que así quedan integradas a un orden sagrado.
martes, 14 de diciembre de 2010
OCHO ESTANCIAS SOBRE EL INCOMPARABLE, de Abhinavagupta
1.- Aquí ninguna necesidad de progreso espiritual, ni de contemplación, ni de habilidad dialéctica, ni de investigaciones; ninguna necesidad de meditar, ni de concentrarse, ni de ejercitarse en farfullar oraciones. ¿Dime cual es la Realidad última absolutamente cierta? Escucha esto: no tomes ni dejes (no vayas en busca de nada ni abandones tus obligaciones), y tal como eres, disfruta felizmente de todo.
2.- Desde el punto de vista de la Realidad absoluta, no hay transmigración. ¿Cómo se habla entonces de obstáculos en relación a los seres vivientes? Ya que el ser libre nunca ha tenido trabas, intentar liberarlo es vano. No hay más que la ilusión de la sombra imaginaria de un demonio, una cuerda confundida con una serpiente que produce una confusión sin fundamento. No dejes nada, no tomes nada, bien establecido en tí mismo, tal como eres, pasa el tiempo agradablemente.
miércoles, 8 de diciembre de 2010
NOTA SOBRE EL NOMBRE DE ALLAH, por Manuel Plana
El nombre Allâh significa literalmente El Dios (en el sentido de Alabado, Adorado), el artículo se une aquí al nombre formando una sola palabra, es la contracción de al-illah. (1) Los maestros del Tasawwuf ven una distinción primordial entre estas dos palabras. Al (Él: Huwa) es apelativo de la esencia trascendente, incondicionada e inefable, el No-Ser divino, y Lâh el apelativo de la inmanencia creativa, conservadora y transformadora (respectivamente, Belleza-Jamâl, Misericordia-Rahman y Majestad-Jalâl) de un mismo Principio o Ser universal, la función de divinidad. Ambos aspectos, en realidad inseparables, trascendente e inmanente de lo mismo, se ponen en relación con el cero y la unidad metafísicos respectivamente.
sábado, 4 de diciembre de 2010
NOTAS A POSIBLES REFERENCIAS DE MUHAMMAD EN DISTINTOS TEXTOS SAGRADOS, por Sergio Trallero Moreno

Una vez hechas estas advertencias, y con la prudencia que requiere un asunto tan complejo como la exégesis de los textos sagrados y el carácter vivo y multidimensional de la Revelación (esotéricamente hablando), se pueden considerar dichos fragmentos.
miércoles, 24 de noviembre de 2010
LOS PECES NECIOS: Antiguo cuento sufí atribuido a An-Nasafi.
Se preguntaban unos peces qué era el agua. El barbo decía: es una materia desconocida. La carpa: es un invento de los sofistas. La trucha: es un poder invisible. Querían saber más y para salir de dudas decidieron buscar a un pez sabio. Encontrarlo no les fue fácil, pero al fin dieron con uno. Él les dijo: El agua es vuestro elemento vital y también vuestro sustento. Os penetra y os rodea por todas partes, vivís y nadáis dentro del agua, por eso no la veis. Ellos se miraron extrañados; este pez está loco y desvaría, se dijeron entre sí, y marcharon decepcionados.
sábado, 20 de noviembre de 2010
MUHAMMAD: EL SELLO DE LA PROFECÍA, por Sergio Trallero Moreno
“Muhammad no es el padre de ninguno de vosotros, sino el enviado de Dios y el Sello de los Profetas. Dios es omnisciente” (Corán 33:40)
“La semejanza de los profetas que me han precedido conmigo es parecida a la de un grupo de obreros que han participado en la construcción de un edificio y lo han acabado dejándole un hueco vacío para una sola piedra o un sólo ladrillo. Los transeúntes dirán con asombro si solamente falta este ladrillo. Ese soy yo, quien llena ese espacio, y yo soy el último y el Sello de los profetas!” (Dicho del Profeta)
“La semejanza de los profetas que me han precedido conmigo es parecida a la de un grupo de obreros que han participado en la construcción de un edificio y lo han acabado dejándole un hueco vacío para una sola piedra o un sólo ladrillo. Los transeúntes dirán con asombro si solamente falta este ladrillo. Ese soy yo, quien llena ese espacio, y yo soy el último y el Sello de los profetas!” (Dicho del Profeta)
El soporte y vehículo de toda Revelación es lo que se entiende comúnmente como religión, pero de una forma más precisa Tradición sagrada, que en ocasiones presenta un entramado legal y moral de cariz exterior (manifestada en distintas formas según el momento histórico) pero que siempre es caracterizada por una dimensión trascendente, una doctrina metafísica, de esencia única y atemporal, en su núcleo más esotérico. Los profetas de las distintas tradiciones son así símbolos que cristalizan y actualizan aspectos metafísicos de lo divino, o mejor dicho, canales puros de una misma Verdad Eterna. Según el dicho de Muhammad : “Los Profetas son hermanos en su origen, nacidos de madres distintas, pero de una misma Religión” (Muslim, Sahîh, II, 224).
jueves, 11 de noviembre de 2010
DIESTRA Y SINIESTRA. NOTA SOBRE EL SIMBOLISMO CORPORAL, por Manuel Plana
La analogía que todas las sociedades tradicionales observan entre el hombre y el cosmos, hasta el punto de llamarlos, respectivamente, micro y macrocosmos, es algo más que una simple relación “natural” y también que una ingenua metáfora, para ellas son la expresión, reducida y ampliada, de una misma Realidad . Que “el hombre es la medida de todas las cosas” (Protágoras) evidencia en la cultura occidental este hecho común en la Tradición unánime, que la constitución del universo la lleva el hombre impresa en sí mismo, conjuntamente con todas las posibilidades que implica. El hombre, tomado aquí como paradigma, no se refiere al mero estado corporal, a su individualidad psicofísica, que es lo que menos lo diferencia, precisamente, de los animales, sino al Hombre total, al hombre anímica y espiritualmente completo.(1)
Esa perfección primordial, después perdida, incluye esa totalización o síntesis de posibilidades que incluyen los diferentes “mundos” o estados que componen la manifestación universal, actualizados en el Hombre perfecto, grado espiritual o “don original” solo accesible a través de un proceso iniciático de realización a partir de cierto momento.
Es congruente con este pensamiento que, hasta cierto punto, el hombre antropomorfice su ámbito cósmico, pues en relación a él es su unidad de medida, su patrón, y de igual modo, que él mismo y su sociedad se “cosmogonice”, se atribuya e imite comportamientos del cosmos astral y telúrico, ellos mismos símbolos de la realidad espiritual y la sensible, del Cielo y de la Tierra. En el lenguaje común y en el culto, en la toponímia, los patrones de medida, las herramientas, los instrumentos, etc… se encuentran indefinidas evidencias de un simbolismo corporal del que aquí estudiaremos tan solo el relacionado con las manos.
Esa perfección primordial, después perdida, incluye esa totalización o síntesis de posibilidades que incluyen los diferentes “mundos” o estados que componen la manifestación universal, actualizados en el Hombre perfecto, grado espiritual o “don original” solo accesible a través de un proceso iniciático de realización a partir de cierto momento.
Es congruente con este pensamiento que, hasta cierto punto, el hombre antropomorfice su ámbito cósmico, pues en relación a él es su unidad de medida, su patrón, y de igual modo, que él mismo y su sociedad se “cosmogonice”, se atribuya e imite comportamientos del cosmos astral y telúrico, ellos mismos símbolos de la realidad espiritual y la sensible, del Cielo y de la Tierra. En el lenguaje común y en el culto, en la toponímia, los patrones de medida, las herramientas, los instrumentos, etc… se encuentran indefinidas evidencias de un simbolismo corporal del que aquí estudiaremos tan solo el relacionado con las manos.
jueves, 4 de noviembre de 2010
NOTA SOBRE LA GRAFÍA DE LOS NÚMEROS ÁRABES, por Manuel Plana
Los números, como todos los lenguajes y códigos humanos primordiales, preexisten en el Intelecto divino ( y cósmico), es decir, en el Espíritu, al ser su propia irradiación, y nacen por revelación espontánea al estar incluidos en el propio ADN ontológico del ser humano (que no es sino una síntesis de ese Intelecto y una manifestación diferenciada de la unidad total indiferenciada), en el momento que necesita hacerlo. Como tales, son considerados una ciencia sagrada por excelencia, y en base a ellos y a sus diferentes lecturas (metafísica, ontológica, cosmológica, simbólica, conjetural, mercantil...) las sociedades antiguas y las tradicionales de todos los tiempos, han construido su civilización, su calendario ritual, sus ciudades y su orden interno.
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