Mundo Tradicional cumple cinco años de su existencia en la red con un saldo de más de 3000 visitas al mes, principalmente del mundo hispano-hablante, que si bien es nada comparado con otras webs, es bastante, a nuestro parecer, para este tipo de temas, dando por sentado que jamás hemos pretendido ser “populares”, hacer proselitismo ni vulgarizar los temas.
A estas alturas y visto que algunos sitios y blogs usan nuestros trabajos y estudios originales (más de un centenar ya), a la vez que algunos seguidores se han puesto en contacto con la Redacción, tendríamos que señalar de nuevo que, a pesar de tocar tradiciones diversas, ninguna se toca desde “fuera” o desde un saber “académico”, y mucho menos de “aficionado” o de “buscador”.
Curiosamente, algunos asiduos a M.T. nos han llamado “académicos” o han deducido que lo somos a decir por la seriedad y el rigor en el tratamiento de los temas. Sin embargo, no lo somos y francamente no nos interesa la óptica “escolar” ni académica, ni la erudición ni el historicismo, bien interesantes desde otro punto de vista pero que no es el nuestro.
Nuestra perspectiva es esencialmente iniciática con toda modestia, precisamente porque es la que menos atención prestan los medios y los medias en general, sino no es casi siempre desde un lamentable enfoque pseudo-iniciático cuando mucho, cargado empero de pueriles pretensiones. Vale decir que nuestro enfoque se desprende de linajes iniciáticos bien concretos y reales y nada más… ni menos.
Hemos intentado cumplir lo mejor posible con el enunciado del subtítulo: Espiritualidad de Oriente y de Occidente, sobretodo acercando tradiciones vivas pero prácticamente desconocidas de Oriente a Occidente, como el Shivaismo advaita cachemir y el Tasawwuf islámico, sin dejar de ser fieles al espíritu de ellas mismas y sin intención de alterar su discurso con la excusa de “adaptarlas” a la mentalidad occidental.
Esperamos poder continuar con tan loable labor y ser útiles a muchas personas que ya mismo sienten un intenso deseo de ser realmente ellas mismas y no un confuso producto mental del difícil medio que nos ha tocado vivir.
La Redacción