La muerte de Katherine Mansfield en el “Instituto” (20) produjo en Ouspensky una fuerte impresión que le llevó a romper con Gurdjieff. Pero una impresión todavía más fuerte le causó el accidente de coche sufrido por Gurdjieff en el cruce de las carreteras nacionales nº 7, de París a Fontainebleau, y nº 168, de Versailles a Choisy-le-Roi.
Gurdjieff regresaba en coche, solo y de noche, de París al Prieuré. Se desconoce la causa del accidente, pero el hecho es que chocó contra el tronco de un árbol a más de sesenta por hora, y resultó gravemente herido. Enterado unos días más tarde, Ouspensky vino a París desde Londres; y ambos fuimos al lugar de la catástrofe.
Abatido, hundido, tras un prolongado silencio me dijo:
- Tengo miedo…, es espantoso… El Instituto de Georges Ivanovitch (Gurdjieff) se creó para escapar a la influencia de la ley del azar bajo la que pasa la vida. Y he aquí que él mismo ha caído bajo el imperio de esa ley…
Y prosiguió:
- Me pregunto aún si ha sido realmente un puro azar (Gurdjieff no valoraba mucho la honradez, como tampoco la personalidad humana en general; ¿Se pasó de la raya?). Les repito, ¡tengo un miedo terrible!
Retomamos el camino, silenciosos. En Fontainebleau entramos en un restaurante para almorzar. Me pidió que telefoneara al Prieuré a su nuera, que formaba parte de los “filósofos del bosque”. Pero no estaba en casa.
Durante el almuerzo, Ouspensky se refirió varias veces a la cuestión del valor real de la honradez. Era claro que para él, el problema era una especie de punto clave. Y, mediante una serie de asociaciones, para mí insondables, relacionaba la cuestión de la honradez con el accidente sufrido por Gurdjieff.
Sin embargo, como hemos dicho, Ouspensky no rompió con Gurdjieff más que físicamente, por así decirlo. Tras ello, y al menos en sus conversaciones conmigo, no le gustaba volver al análisis del “fenómeno Gurdjieff”. Después de varias evasivas, le hice la pregunta directa: por qué evitaba este tipo de conversación que, en mi opinión, podía ser instructiva y de la que al menos se podía sacar una lección.